El Sistema Público Sanitario en Cataluña está hirviendo.
Es una obligación del Gobierno Autónomo pararse, reflexionar y permitir que nuestro Sistema Público continúe siendo uno de los mejores sistemas sanitarios de Europa y del mundo.
No lo digo yo, no es una exageración. Son palabras de Tom Sharp, escritor inglés que vive desde hace más de 20 años en las comarcas gerundenses, en concreto, en Llafranc. Dice Tom Sharp: “Por experiencia propia, la medicina catalana es la tercera mejor del mundo. ¿Como es posible ahora tirarlo todo por la borda?”. Tiene el escritor motivos personales para hablar de esta manera.
El Consejero Ruiz avanzó nada más tomar posesión del cargo cuál sería la política a aplicar por su departamento y dijo que todo aquel ciudadano que tuviera o se hiciera un seguro privado se beneficiaría de rebajas fiscales. E aquí cómo el Gobierno de los mejores quiere hacer caja, confrontando el sistema público sanitario a las rebajas fiscales.
Parece que ya han comenzado a atacar la imagen del sistema público, hasta recortando la asistencia sanitaria publica con anuncios del cierre de plantas en los grandes hospitales de Cataluña. La paciencia de la gente se agota y, la de los sectores asistenciales y de enfermería también.
Lo que debería hacer el Presidente Mas es acometer un verdadero debate con todas las partes implicadas con tal de que la política de recortes lineales en servicios sanitarios, socio sanitarios, de dependencia y de educación no se produzcan y se trabaje en un pacto social que garantice las prestaciones de todos los servicios a la población.
No es de recibo que el Gobierno diga ahora que los recortes están en estudio.
Sr. Mas, reconozca usted que el Gobierno de los mejores se ha pasado de frenada, porque sí que es cierto que ha habido una bajada de ingresos, como en todas las Administraciones, pero no es menos cierto que su política está llevando a los hospitales al colapso en camas de enfermos críticos. Cuando pasaba esto, se enviaban a estos pacientes a otros hospitales, pero ahora no los aceptan porque dicen que no les pagarán los servicios que se les preste a estos enfermos.
Hasta aquí podríamos llegar. Sr. Mas pare usted esta situación. Siéntese con los sindicatos, los médicos, los partidos políticos… Debata y acuerde con los interlocutores sociales y parlamentarios de Cataluña, las posibles soluciones que seguro encontraremos para garantizar los servicios de bienestar de los catalanes y las catalanas.
Por una salida social de la crisis con justicia social. No estamos solos.
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