Los ciudadanos europeos tenemos derechos y deberes gracias entre otros, al Tratado de Lisboa.
En nuestro continente se están produciendo desde hace algún tiempo comportamientos que nada tienen que ver con la génesis de la idea de Europa, ni con los procesos vividos para la configuración social, política y de ciudadanía europea desde la fundación de la CECA, (Comunidad Europea del Carbón y del acero) después de la II guerra mundial.
El racismo es una enfermedad que si se medica es posible su control y si profundizamos con la medicina de la concordia, el conocimiento del otro, la tolerancia y la justicia social, creo que podríamos llegar a curarla.
Como decía anteriormente se están produciendo en los últimos tiempos un repunte de los partidos racistas.
Creo que estamos ante unos planteamientos calcados en los partidos de la derecha europea, dicen los expertos que la reacción de Sarkozy esta basada en intentar que el partido ultraderechista de Le Pen no crezca y le reste votos a su partido la UMP (Unión por un movimiento popular), partido que en las elecciones regionales del 14 de Marzo de 2010 fue castigado por la abstención que llego al 53%, votaron 22 de 42 millones de los franceses con derecho a voto.
No es casual que el partido de Sarkozy en Enero de 2010 hablara de la prohibición del “burka” y que en el mes de Agosto iniciara la expulsión de ciudadanos europeos gitanos de origen Bulgaro y Rumano, y lo han hecho mezclando emigración y etnia gitana.
Pero no es casualidad que el PP y la UMP vayan a firmar un acuerdo de colaboración según la Sra. de Cospedal, basado en la inmigración y en la “agenda bilateral” entre los dos partidos populares el de Francia y el de España. La derecha europea deberá dejar claro a los ciudadanos gitanos europeos que, nunca más hablaran de ellos como si fueran emigrantes, porque no lo son. Si son errantes.
En Francia se expulsa a gitanos Rumanos y Húngaros por el hecho de ser gitanos, cuando las leyes europeas y las de los países miembros dicen claramente como se debe expulsar a los individuos que hayan cometido algún delito, siempre con denuncia de los hechos y sentencia judicial en firme, deben ser igualmente de carácter personal y nunca como grupo o por su pertenencia a una etnia concreta.
Los populares españoles han intentado hacer de este tema una ocasión para levantar bajas pasiones xenófobas en España. Así en la ciudad de Badalona y exponiendo a una diputada del partido de Sarkozy con la intención perversa de hacer ver que el “problema gitano “en Cataluña y España es el mismo que en Francia.
Esto es en mi opinión fruto del desplazamiento del partido popular hacia planteamientos xenófobos y yo creo que oportunista y electoral.
El grupo parlamentario en el Congreso de los Diputados y el partido socialista están preocupados por estos acontecimientos y en consecuencia tiene registrada un Proposición no de Ley, que quiere llamar la atención pública sobre esta cuestión tan peligrosa si es utilizada desde las derechas como arma política.
En España la diferencia esta muy marcada, ya que las políticas de inclusión del Pueblo Gitano que el gobierno de J. L. Rodríguez Zapatero a impulsado en los últimos siete años así lo demuestran, como ejemplo de ello, se puso en marcha el Plan de desarrollo del Pueblo Gitano, el Plan de Inclusión del Estado en colaboración con las Comunidades Autónomas, la creación del Instituto de Cultura Gitana y la constitución de Consejo Estatal del Pueblo Gitano como órgano representativo de la realidad gitana española.
En nuestro continente se están produciendo desde hace algún tiempo comportamientos que nada tienen que ver con la génesis de la idea de Europa, ni con los procesos vividos para la configuración social, política y de ciudadanía europea desde la fundación de la CECA, (Comunidad Europea del Carbón y del acero) después de la II guerra mundial.
El racismo es una enfermedad que si se medica es posible su control y si profundizamos con la medicina de la concordia, el conocimiento del otro, la tolerancia y la justicia social, creo que podríamos llegar a curarla.
Como decía anteriormente se están produciendo en los últimos tiempos un repunte de los partidos racistas.
Creo que estamos ante unos planteamientos calcados en los partidos de la derecha europea, dicen los expertos que la reacción de Sarkozy esta basada en intentar que el partido ultraderechista de Le Pen no crezca y le reste votos a su partido la UMP (Unión por un movimiento popular), partido que en las elecciones regionales del 14 de Marzo de 2010 fue castigado por la abstención que llego al 53%, votaron 22 de 42 millones de los franceses con derecho a voto.
No es casual que el partido de Sarkozy en Enero de 2010 hablara de la prohibición del “burka” y que en el mes de Agosto iniciara la expulsión de ciudadanos europeos gitanos de origen Bulgaro y Rumano, y lo han hecho mezclando emigración y etnia gitana.
Pero no es casualidad que el PP y la UMP vayan a firmar un acuerdo de colaboración según la Sra. de Cospedal, basado en la inmigración y en la “agenda bilateral” entre los dos partidos populares el de Francia y el de España. La derecha europea deberá dejar claro a los ciudadanos gitanos europeos que, nunca más hablaran de ellos como si fueran emigrantes, porque no lo son. Si son errantes.
En Francia se expulsa a gitanos Rumanos y Húngaros por el hecho de ser gitanos, cuando las leyes europeas y las de los países miembros dicen claramente como se debe expulsar a los individuos que hayan cometido algún delito, siempre con denuncia de los hechos y sentencia judicial en firme, deben ser igualmente de carácter personal y nunca como grupo o por su pertenencia a una etnia concreta.
Los populares españoles han intentado hacer de este tema una ocasión para levantar bajas pasiones xenófobas en España. Así en la ciudad de Badalona y exponiendo a una diputada del partido de Sarkozy con la intención perversa de hacer ver que el “problema gitano “en Cataluña y España es el mismo que en Francia.
Esto es en mi opinión fruto del desplazamiento del partido popular hacia planteamientos xenófobos y yo creo que oportunista y electoral.
El grupo parlamentario en el Congreso de los Diputados y el partido socialista están preocupados por estos acontecimientos y en consecuencia tiene registrada un Proposición no de Ley, que quiere llamar la atención pública sobre esta cuestión tan peligrosa si es utilizada desde las derechas como arma política.
En España la diferencia esta muy marcada, ya que las políticas de inclusión del Pueblo Gitano que el gobierno de J. L. Rodríguez Zapatero a impulsado en los últimos siete años así lo demuestran, como ejemplo de ello, se puso en marcha el Plan de desarrollo del Pueblo Gitano, el Plan de Inclusión del Estado en colaboración con las Comunidades Autónomas, la creación del Instituto de Cultura Gitana y la constitución de Consejo Estatal del Pueblo Gitano como órgano representativo de la realidad gitana española.
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